Revista Contante y Soñante 9

miércoles, noviembre 23, 2005

Un poco de Talento Colombiano Olvidado



Esta es una foto que Ruven Afanador, fotógrafo colombiano (Bucaramanga) catalogado como el mejor fotógrafo de modas del mundo, aquí vemos el lente de su cámara obturado frente la presencia de Al Pacino.

lunes, noviembre 21, 2005

"DEL CAMINAR"

¿QUÉ PASARÍA SI NOSOTROS NO NOS MOVIÉRAMOS, SINO QUE FUESE EL PISO EL QUE PASARA DEBAJO NUESTRO? (5) Hipótesis Fantástica

Frente a esta proposición descabellada se me ocurre repentinamente una teoría que al releerla, después de escrita, no luce tan descabellada como renglones más atrás.Los invito a la lectura y a la apertura de sus mentes, porque tal vez en este mismo momento usted puede estar siendo atraído hacia su próxima visita.

Esta teoría, aparte de autodestructiva, carece de bases científicas tan firmes como para generar duda y controversia… aunque sí tenga unas pequeñas bases desde la física.

Todos, cuando caminamos, o nos “dirigimos” a un lugar por medio de un vehículo, vemos que afuera, los cuerpos estáticos se quedan atrás a medida que “avanzamos”, con comillas. Pero todo esto son efectos visuales que por medio de nuestro sistema para captar el mundo, nos engañan; pues la verdad radica en que nosotros –háblese de humanos y seres vivos “autónomos”-, nunca nos desplazamos de un lugar a otro. Sino, que al hacer el ejercicio de caminar, el universo (o la tierra, que es lo que hasta ahora he probado) en conjunto se mueve hasta dejar a nuestro alcance el “lugar” hacia el cual nos ”dirigimos”.
¿Cómo es esto? Al caminar, el piso empieza a moverse en dirección opuesta a nuestra meta, a manera de banda o alfombra que empieza a pasar debajo de nuestros pies, hacia atrás. Y, a medida que avanza, nuestra meta es “arrastrada” hacia nosotros, estáticos hasta que más.
De pronto, algún lector curioso puede estar ensuciando el nombre de mi madre mientras se pregunta si yo pienso que la persona que “camina” es el centro del universo. Tranquilo, pues para ti lector curioso, que espero estés ahí, “vendrá” pronto una respuesta tan acertada como las ideas propuestas hasta ahora.

Pro“sigamos”.
Ellos, están detrás nuestro halando la alfombra que queda para que no se enrede y/o acumule y le dificulte el caminar a otros. Ése es el trabajo de Ellos, estar detrás encargándose de dejar el mundo como si no se hubiera movido.
Lo divertido empieza cuando nuestra velocidad comienza a variar. Por esto deben (Ellos) estar atentos a los cambios generados, para no generar un cúmulo o “arruga” gigante en el espacio –lo cual tiene consecuencias magnéticas de cuidado-. Entonces, Ellos deben reaccionar a la par con nuestro caminar.
Muy bien, pero ¿qué pasa cuando alguien camina a tu lado, por ejemplo?; pues, dos de Ellos estarán allí poniendo todo en orden. Muy pocos lo saben, pero a Ellos les encanta que caminemos acompañados, así pueden discutir acerca de su trabajo. Decir cosas como: “¡Carambolas, qué carajillo pa’ andar!”, a lo que su par responde: “No digás nada, que vieras los lugares que trajo ésta. Mirá como tengo las manos, guácala!”. Y así sucesivamente, por lo que su trabajo se torna mucho más liviano. Por eso, un bus es una de las reuniones típicas de Ellos. Todos detrás del bus halando la alfombra y hablando de los lugares que han pasado a su alrededor.
Los lugares pasan!, ¿Difícil de aceptar?
Por ésta razón, por la reunión de Ellos, es que un vehículo ve más lugares pasar por su lado en menos tiempo.

- Hola, Sr. Lector Curioso, todavía me rechaza? Déjeme mandarle las respuestas.
El “Desplazando” no tiene que ser el Centro Del Universo (CDU) para que los lugares pasen tras él. Cada uno de los seres energéticos que se “mueven” aplican el mismo proceso. Ahora usted dirá que el espacio sería un nudo arrugado y apretado, que sería un caos; pero permítase un momento y piense que la reunión y suma de todos los “movimientos” es igual a cero, aproximadamente, porque no voy a decir que todo es perfecto.
Al tiempo que usted camina “al” Norte, alguien más lo hace “hacia” el Sur. Cuesta arriba, calle abajo; izquierda y derecha. Ahora, tal vez no siempre sea al tiempo, pero en algún momento, alguien cumplirá esta ley y se volverá a cero, inclusive, puede ser usted mismo quien cada noche “vuelva” al lugar de donde “salió” en la mañana. Entonces termina en la misma parte. Como siempre lo es. Su lugar! No tema, usted también es desplazado hacia sus visitas, ¿desafiante?
Ahora, imagine cuando alguien camina frente a usted, en dirección contraria a la suya. Este fenómeno es complejo aunque magnánimamente común. La velocidad de encuentro es mayor, puesto que los dos traen hacia sí mismos a su “con-caminante”. Poco notorio, pero cierto.
De este planteamiento se desprenden las acciones más diabólicas inimaginables –pues a nadie se le ocurren-, que son:

EL HALÓN DE PISO: Éste implica un alto grado de confianza con el Él que a usted le corresponda. Aquí usted necesita convencerlo de que entretenga al Él que va detrás del sujeto a mofar. De esta manera no podrá reaccionar al carrerón que usted emprenda desatando un jalón en el piso en dirección contraria a su oponente y si tiene suerte le proporcionará una “caída” que le dejará enfadado y a la vez desentendido. Aunque claro está, inofensiva físicamente, pues es todo Psicológico. O acaso a usted lo ha herido el contacto con algún objeto, ¡triste novatada mental!

CESE DE MARCHA: Cuando alguien “viene” hacia usted, lo único que tiene que hacer es dejar de caminar, así ese otro tendrá que cargar con su peso y la alfombra pasará más dificultosamente. Nada más.

AYUDA DESINTERESADA: Si la solidaridad lo embarga, usted podría ayudar a un ser querido a “llegar” a su meta más rápidamente. Sólo sitúese a sus espaldas, mirando la misma meta y cuando emprenda la marcha, hágalo usted también a la mayor velocidad posible, así el espacio pasará rápidamente a su lado y éste podrá llegar a su meta más fácil, sólo que usted tendrá alrededor lugares que no necesita.

QUIETUD INEXPLICABLE: Sitúese a espaldas del sujeto a mofar, dándole la espalda, y en el momento en que éste comience a caminar, hágalo usted también tan rápido como pueda, en dirección contraria; lo que generará un estancamiento en el otro, o si usted es tan diestro, inclusive una “devolución”. Lo malo es que usted traerá, como en el caso anterior, lugares involuntariamente, en lo que hay que tener cuidado.
El éxito de esta fanfarronada depende de la casual habilidad de su Él y la inutilidad del Él del sujeto.

Otra clase se desplazamientos del espacio a su alrededor se desata cuando usted “aborda” una escalera. Aquí el espacio se mueve en otro plano, estirándose o achatándose según su voluntad. Todo solucionable con los maravillosos promedios que dejan a los desplazamientos totales en cero. Al igual que las experiencias en los ascensores. Curioso, ¿no? Variando la velocidad, por supuesto.
Otra más se genera cuando usted, mueve un brazo, supongamos hacia arriba. Aquí el resto de su cuerpo sufre el desplazamiento en conjunto con el espacio, moviéndose uniformemente hacia arriba o hacia abajo dependiendo de si el brazo lo hace hacia abajo o hacia arriba, respectivamente. Sucediendo lo mismo con un “abrir” y “cerrar” de ojos. ¡Hermoso!

Si usted tiene alguna duda acerca de “Ellos”, no se preocupe, ése es su trabajo, Ellos están ahí “desarrugando” su caminar, sin quejarse, pues lo disfrutan sobremanera, ya que el ser humano tiende a estar acompañado, así que ellos también. Perdón, Ellos también. Usted sólo camine decidido, porque el cambio rápido y repentino de direcciones los confunde y atrasa en sus labores.
Camine “hacia” adelante, déjelos a Ellos trabajar, lo hacen por usted.

Ahora, tengo que revelar algo triste.
Aquellos, en otrora maravillosos promedios, ponen en duda toda esta teoría. Pues, me duele admitirlo, pero si las sumas de los desplazamientos resultaran siempre en cero, quiere decir que no habría ninguno. Algo aceptable al fin de cuentas.
Aunque también lo dije, dan cero, aproximadamente, así que existe un breve margen de error que devela un pequeñín porcentaje de movimientos que trascienden en el espacio. Ahora, por su bien y el de esta teoría, manténgase fuera de los esquemas y promedios.



ANEXOS


LOS CIELOS DESTEMPLADOS:
Ellos están contratados también para halar el tapiz del cielo, y templarlo para que el viento sople y se lo lleve desde la mañana, hasta la noche.
RÍOS DE ELLOS:
Si usted quiere aprovechar una de las pocas posibilidades de verlos a Ellos, note que nosotros navegamos sobre las grandes multitudes de Ellos que se dirigen del trabajo a casa, pues ellos también descansan y leen cuentos de la osada realidad.
NUESTRA IGENUIDAD:
Al terminar las jornadas laborales, tal vez usted sienta cansancio, pero trate de asimilar que éste no es más que un efecto psicológico que se riega por su cuerpo. Pues no hay razón para la fatiga cuando usted no se ha movido de su lugar.
LA NATURALEZA DE LA LLUVIA:
Siguiendo cuidadosamente todo lo anteriormente propuesto, usted llegará a entender que un fenómeno tan común como la lluvia lleva un proceso complejo para darse a cabo, ya que implica la atracción de grandes cantidades de agua hacia su plano perpendicular. Este fenómeno implica que por medio de “quién-sabe-qué” orden involuntaria del cerebro, dictada en comunión con los otros cerebros, se desarrolle; puesto que de por sí cuando llueve, ocurre a su alrededor y al de muchos otros a su lado. Ahora imagine que cuando llueve es como volar, así que aproveche mejor el próximo aguacero.
INCÓGNITA FINAL
¿Cuál es el Punto Cero del Hombre? En el momento de ir a la cama, puede preguntarse si ése es su punto cero, el lugar real al que usted ha estado ligado durante todo su viaje. O si es la oficina, la cama de su amante, o el cuarto sanitario. La verdad, mi opinión con respecto a esta duda es totalmente personal, y es el escenario, las tablas. El lugar en el cual reúno a cientos de personas, las cuales muevo hacia delante o hacia atrás con cada movimiento que realizo al contrario, simplemente fascinante. La venia final es un sacudón que no nota la muchedumbre, y que sólo yo disfruto en tal magnitud. Gracias.



Por: Il Magro